domingo, 31 de enero de 2010

TE LA CREIO TÚ

Que no hombre, que no.

Decir que la solución para el Sistema de Pensiones es retrasar la edad ordinaria de jubilación a los 67 años, es tanto como decir que la hambruna de África se eliminaría si posponemos la hora del almuerzo a las 5 de la tarde.

Señor Presidente, ¿recuerda Ud. a unos humoristas que se llamaban “Duo Sacapuntas”? Pues eso… veintidós, veintidós, veintidós.

La solución la tiene delante de sus narices y quizás sea un misterio que obedece a las Leyes de la Cábala; veintidós, veintidós, veintidós.

1.- 22% de Economía Sumergida
2.- 22% de Tasa de Desempleo.

Bueno quien dice la solución, dice la raíz del problema que en los tiempos que vivimos poco importa que fue antes si el huevo o la gallina. Hoy lo que se lleva es liarse la “kufiya” (turbante palestino) a la cabeza y así de esta guisa ataviado lanzar el globo sonda a ver que tal cae la idea en el populacho.

Y mientras unos ni están ni se les espera (lo digo por los Sindicatos) otros a sus líos de faldas (quien dice faldas dice aerolíneas) y yo, que soy más de “cashmere” que de algodón, pues aquí con la bata sentado en el sofá y escribiendo “Tu Canción”.

Joder (con perdón), que poco me gusta como caza la perrita.

Hace sólo un par de meses tuve la ocasión de coincidir en un viaje de trabajo con un Socio de un importante Despacho de Abogados. Ricardo, me decía, "nos han llamado del Ministerio para preguntar nuestra opinión y para que propongamos soluciones. Y ¿tú desde la trinchera del día a día qué piensas que se debe hacer?"

"Hay que poner en marcha herramientas para reducir los 22 de inmediato", le dije. Continuamos hablando largo y sentado y concluimos que el “quid” era tomar desde las Administraciones acciones valientes por lo impopulares que serían. Pero prometo que nadie pensó en echar por tierra los "Pactos de Toledo”. Qué huevos.

Para los que no estéis muy familiarizados con esto de la Seguridad Social un breve resumen en 2 parágrafos. En 1994, a propuesta del Grupo Parlamentario de CiU, se creó una ponencia para analizar los problemas que presentaba el Sistema de la Seguridad Social. El resultado fue un texto que toma nombre de la ciudad donde se gestó y que ha significado el eje y compromiso básico de todos los grupos parlamentarios y de los agentes sociales en lo que respecta al Sistema Público de Pensiones.

El texto contenía 15 recomendaciones que versan sobre las fuentes de financiación del Sistema, el mantenimiento del poder adquisitivo de las pensiones, la constitución de reservas para cubrir los ciclos demográficos o económicos de bajos ingresos e incluso sobre asuntos muy técnicos como la integración de los regímenes especiales.

Volviendo a la actualidad, parece claro que en esto de las pensiones la teoría de “las gallinas que entran por las que salen” ha dejado de funcionar y la solución es cuestión de echarle huevos. Mi impresión, siguiendo con el símil, es que cada día que pasa tenemos más cluecas y menos ponedoras. Y así las cuentas no salen. Y en esto que va el Presidente y decide que la solución pasa por poner 24 horas de luz a las pocas gallinas Leghorn que teníamos en el corral (para los urbanitas esta raza es el sumun entre las gallinas ponedoras).

Que no señor mío, que no. Que no se puede exprimir más al que ya lo ha dado todo. Que el problema y la solución están al otro lado de la cerca y no dentro del gallinero.

Aquí lo dejamos por esta semana pero todavía quedan muchos huevos que tocar. Y si no que se lo digan a un amigo mío que ha sido prejubilado por 2 veces. La primera en RTVE y la segunda en la Agencia EFE. Curiosa Ley la de Incompatibilidades y buen abogado el suyo.

Como decía al principio: “Te la creio tú” (Chambao 2005).


TE LA CREIO TÚ

domingo, 24 de enero de 2010

TODO A PULMÓN


"Adiós que te vaya bonito", le dije. Y el mono se fue a donde viven los monos, que aquí en Cantabria se llama Cabárceno.

Ya en el mundo real, hay veces que uno debe ganarse el pan como Director y olvidarse de ese otro 50% que son los RRHH. Esto es, hay que comunicar acciones que pueden resultar muy duras para los interlocutores. Dependiendo de la posición que se ostente dentro de la pirámide jerárquica de la Compañía, estas decisiones son propias en más o menos porcentaje. Así, cuanto más arriba se esté suele resultar más sencillo, ya que uno ha tomado parte o incluso ha sido el promotor de la situación.

Mi consejo es conjugar la orden con un mensaje motivador. No es lo mismo decirle a tu hijo: “Apaga la tele que son las 11 y media de la noche”, que “Apaga la tele que tienes que descansar, para mañana jugar ese partido de padel tal importante que tenemos contra los Zubía”.

Claro que, también hay veces que en el mensaje debemos reconocer que la decisión a comunicar proviene de un previo error nuestro. Así, hay que mencionar de manera clara e inequívoca el error en el mensaje. Siguiendo con el ejemplo tendríamos: “¿Pero qué haces todavía viendo la tele? Es culpa mía ya que no te dije que hasta las 11, pero apaga la tele que tienes que descansar, para mañana jugar ese partido de padel tal importante que tenemos contra los Zubía”.

Quizás aquí suene fácil de hacer pero para todos aquellos que no estáis muy avanzados en esto de pedir perdón (yo soy un avezado pedidor de perdones dado mi mal carácter) y, para que os resulte más sencillo, podéis incluir una justificación del error al ser éste una parte integrante de la toma de decisiones. Ejemplo: “¿Pero qué haces todavía viendo la tele? Es culpa mía ya que no te dije que hasta las 11, antes de salir a cenar con tu madre, pero apaga la tele que tienes que descansar, para mañana jugar ese partido de padel tan importante que tenemos contra los Zubía”.

Lo cierto es que no siempre podemos dirigir desde el consenso y debemos poner un poco de autoridad en nuestras propuestas. La clave, a mi juicio, consiste en no romper el compromiso de los miembros del equipo y conjugar, en lo posible, el ejercicio del mando con la motivación. Para llevar a buen puerto este tipo de decisiones es necesario la implicación, aún más si cabe, de todos los miembros del equipo.

Una última reflexión. Estos “brownings” (marronazos) no se endosan o delegan. No se puede, y además no se debe. Recordad que el sueldo es global y abarca un 100% que se divide en un 50% en Dirigir y un 50% en RRHH, en Comercial, en Finanzas, en Fabricación, etc.

Decía Peter Drucker que “Donde hay una empresa de éxito, alguien tomó alguna vez una decisión valiente”. Esta frase, que utilizo a menudo en mis declamaciones, la he hecho mía al completarla con “y la supo comunicar de manera adecuada”.

Saber elegir la decisión correcta aunque sea dura y comunicarla con eficacia siempre ha sido una de las principales características de aquellos a los que admiro en lo profesional, y es por ello que hoy os lo he traído a “Tu Canción”.

Que tengáis una buena semana aunque lo que toque no sea especialmente bonito. Yo ahora me voy a jugar al padel con mi hijo Ignacio.

Como decía al principio: “Todo a Pulmón” (Alejandro Lerner 1983).

TODO A PULMÓN

sábado, 16 de enero de 2010

NUESTRO AMOR SERA LEYENDA

A la paz de Dios Hermanos Cantarines. Esta semana en lugar de estar 2 frente al ordenador (mi gran ego y yo), estamos 3. Damos la bienvenida al mono. Sigo sin fumar. Y van 15 días con sus respectivas comidas y cenas.

Hoy os traigo un tema que ya llevaba tiempo queriendo abordar pero que, por unos u otros motivos, había quedado postergado. El caso es que estamos en la semana número 2 del año y acabo de recibir una carta de dimisión.

Un inciso breve pero supongo de interés para muchos. La primera semana del año es aquella que contiene el primer jueves de dicho año. Se presenta con dos dígitos precedidos del carácter W. Esto es, si hoy es día 16 de enero estamos en la SEMANA W02. Todo este saber lo tenéis en la Norma ISO 8601:2004 y es gentileza de Carlos. Ojo con las agendas de pega que están equivocadas. Moleskine, de obvio, no.

Lo dicho, una semana y una baja. Allá por el mes de noviembre pronosticaba que el año iba a ser calentito en esto de la rotación y creo que no hemos errado. Cuando un Mando, un "Manager" como los denominamos en la multinacionales, decide dejar mi Compañía se encienden todas las luces rojas del “Cuadro de Mando”. Una rotación no deseada es un FRACASO más del Equipo de RRHH. Y esto por concepto y de premisa mayor. Luego se pueden buscar los por qué y los condicionantes pero la conclusión no cambia con ello. Vamos que CACA (con perdón).

Cuando contratamos siempre utilizamos la misma fórmula. El pacto es :”TÚ cuida de mi negocio y nosotros cuidaremos de ti en 2 vertientes:

1.- Intentaremos desarrollarte como profesional, fomentando las habilidades que traes y haciendo nacer aquellas que todavía no han roto el cascarón. Te daremos en 2 palabras más empleabilidad y, si Dios quiere, esas nuevas funciones las irás asumiendo en Casa.

2.- Por otro lado, cuidaremos de tu familia con un salario atractivo y de mercado que te permita vivir con comodidad”.


¿Qué hemos hecho mal para que se rompa el pacto? O dicho en terminología de RRHH, ¿Qué ha roto el compromiso del trabajador?

La solución a veces es sencilla y simplemente estamos ante un error en el proceso de selección. Me decía una compañera hace bastantes años: Ricardo, la selección no es más que predicción y ten fe que nosotros acertamos más que el hombre del tiempo”. Nadie me lo ha contado mejor. Seleccionar es prever como reaccionará un individuo en un ambiente determinado (la Empresa). Pues hay veces que se falla.

Otras más, las cosas están bien hechas en cuanto a la selección. Entonces ¿Qué ha sucedido? Pues que no hemos sido capaces de ofrecer un paraíso profesional a la altura de las expectativas del empleado, o lo que es lo mismo, que su desarrollo profesional y personal no ha evolucionado paralelo a su rol en la Compañía. En el momento de la incorporación ambos mundos eran parejos pero con el paso del tiempo se produjo una brecha o ruptura que no detectamos y que ahora no se puede cerrar llevando inexorablemente a la separación.

Supongo que la mayoría conoceréis el chascarrillo de origen anglosajón que explica la diferencia ente Implicado y Comprometido. Dicen ellos que en un plato de huevos con bacon se puede decir que tanto la gallina como el cerdo están implicados. La diferencia es que la gallina está involucrada ya que ha tenido que poner el huevo y el cerdo que, ha puesto un poquito más, está comprometido.

¿Por qué se rompe el compromiso?, ¿Qué hace al cerdo pasar a ser gallina? o ¿Por qué los cerdos abandonan la piara en un determinado momento?

En encontrar la solución estamos ya que si bien es cierto que no hay doctor que los retenga, también lo es que no existe el error al que nosotros nos resignemos.

Como decía al principio: “Nuestro amor será leyenda” (Alejandro Sanz 2009).


NUESTRO AMOR SERÁ LEYENDA

domingo, 10 de enero de 2010

ESPERANDO MI TREN


Soy animal de costumbre y desde hace tiempo utilizo la agenda Moleskine. En concreto uso el modelo Weekly Notebook ( de la gama “12 Month Planners”). Es perfecta. A la izquierda la semana completa y a la derecha una página para escribir el “to do”. Hace 2 años cambié el tamaño y del Large (13 * 21 cm) he pasado al Pocket (9 * 14 cm) que como su nombre indica me permite llevarla en el bolsillo del traje. Para los interesados cuesta unos 20 € y podéis encontrarla en El Corte Inglés. Una cosa más, la de este año ya no es negra, es colorada, imagino que gracias al “diseño italiano” impuesto por los propietarios actuales de la marca.

Después de unos días de “Dolce far niente” que en Castellano significa holgazanería (hay que ver como suenan las cosas en otras lenguas), llega la primera semana del año. Da igual lo que uno lea y dónde lo lea. Es tiempo de propósitos, generalmente de enmienda y sólo para unos pocos de contrición.

Decía Forrest Gump: “Mi mamá dice que la vida es como una caja de bombones, nunca sabes lo que te va a tocar”. Y así es. Sobre todo cuando desconoces de dónde ha salido la caja, cuánto ha costado y mucho menos cuándo fue abierta por primera vez.

Os cuento una historia. En un país lejano vivía un monje y su aprendiz. A principios de año el joven preguntó al monje: “Maestro ¿Qué puedo hacer este año para ser mejor?”. El monje respondió: “Durante el año da una moneda a todo aquel que te agreda”. Y así lo hizo. Al terminar el año volvió para preguntar por el siguiente paso. El monje sin contestar le mandó a por comida, pero utilizando un atajo llegó antes que él a la entrada del pueblo. Disfrazado de harapiento al ver al joven comenzó a insultarle. Este sin alterarse en lo más mínimo le contestó: “Que suerte tengo. El pasado año tenía que pagar a los que me agredían y ahora puedo ser agredido gratis”. En ese momento el monje se despojo del disfraz y le dijo: “El que no da importancia a lo que otros dicen es un hombre que está en el camino hacia la sabiduría. Tu, ya no le das importancia a los insultos y, estás preparado para el siguiente paso”.

Seguro que las intenciones que tenemos consideradas en abstracto son buenas, pero bueno no es lo mismo que eficaz. Para ser eficaces deben formar parte de un plan o como mínimo estar alineadas con la realidad. El epicentro, a mi juicio, debe de ser un cambio de actitud y no unos objetivos. Si lo conseguimos estaremos, como el aprendiz, preparados para nuevos retos y para alcanzar, entonces sí, objetivos más ambiciosos y mejores.

De nade vale decir que queremos algo (empleo, cariño, bienestar, etc) si no cambiamos la actitud. Caso contrario nos pasará como a Forrest y a sus bombones. El problema es que si metemos la mano en una caja cuyo origen y contenido desconocemos es muy probable que el bombón no sea de nuestro agrado. Incluso puede que esté caducado o rancio.

Vayan mis mejores deseos y FELIZ AÑO para todos y por cierto, a la fecha de hoy llevo 8 días sin fumar y esto, hermanos cantarines, para mi es un gran cambio de actitud.

Como decía al principio: “Esperando mi tren” (Revolver 1995).


ESPERANDO MI TREN